Importante
que las patatas se corten "cascandolas". Es decir
que cuando se corten en trozos medianos, suenen "clas",
"clas", "clas". Así el caldo quedará
más espeso y será más rico.
En
una cazuela con aceite rehogamos la cebolla y los ajos, todo
bien picadito. Cuando estén dorados añadimos la carne de cordero picada en trozos pequeños, le damos
unas cuantas vueltas y a continuación añadimos
las patatas y los pimientos verdes cortados, con un poco de
sal, pimentón, el laurel y el perejil. Una vez bien rehogado
cubrimos con agua. Dependiendo de si el chorizo esté
más curado o no, lo añadimos en este momento o
esperamos que hierva un poco. Probamos para ver si necesita
sal y dejamos hervir lentamente la cazuela hasta que esté
todo este en su punto.
Recomendamos
que los chorizos piquen un poquito. Todo estará más
rico.
Mientras
esperamos a que se haga la comida y vamos probando, es muy recomendable
tomarse un vasito de vino de la Denominación de Origen
Rioja.
